El mensaje de resiliencia del Reino Fungi y vegetal


Una de las mayores y mas valiosas enseñanzas del Reino Funga y vegetal, es la medicina de la Resiliencia. En ecología de comunidades y ecosistemas se utiliza este termino para señalar la capacidad de estos de absorber perturbaciones, manteniendo sus características de estructura, dinámica y funcionalidad prácticamente intactas; pudiendo retornar a la situación previa a la perturbación tras el cese de la misma.

Es sumamente destacable que los ecosistemas mas complejos que tienen un mayor numero de interacciones entre sus partes, tienen una respuesta resiliente mas eficiente, debido a la gran cantidad de fuerzas autoreguladoras.

Dichas interacciones de la naturaleza pueden ser claramente observadas con la relación simbiotica entre los reinos vegetal y funga. En lo subterráneo se esconde uno de los misterios más brillantes de la naturaleza, una forma intrincada de generar unión: la Wood Wide Web. Esta oculta red cerebral subterránea, conecta la ancestral sabiduría de los árboles, el mundo fúngi y los microorganismos del bosque. Entre ellos se aseguran de proveer a cada uno, lo que el otro necesita. Esta alianza simbiotica entre las raices de los arboles y hongos se la llama micorrizas 🍄😆. Dicha asociación también facilita la conexión entre las distintas especies de arboles para entablar “chats arbóreos”. Por medio de señales bioquímicas y eléctricas de esta red, son capaces de alimentarse entre ellos mismos y ayudar a sus vecinos cercanos enfermos o carentes de luz o humedad.

La Sabia madre naturaleza con su inmensa compasión, nos ofrece la mas potente revelación de unicidad que el reino humano debería aplicar en sus sociedades. Mientras mas nos nutramos en red, con formas alternativas de apoyarnos mutuamente, lograremos cultivar mas armonía en esta ajetreada transición planetaria. Uniendo nuestras fuerzas, transformaremos competividad en cooperación. Apliquemos el #biomimetismo, seamos inspirados por la natura.

En la foto, el micelio mas activos en el valle donde vivo: Coprinellus micaceus, comúnmente conocida como coprino micáceo o “mica caps”. Esta familia crece todos los años en ese hueco de sauce eléctrico que encuentra como refugio.



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